En los procesos de divorcio, la pensión compensatoria es una cantidad que el cónyuge más solvente debe pagar al otro en caso de que este último tenga dificultades económicas después del divorcio. La cantidad de la pensión compensatoria dependerá de varios factores, como la duración del matrimonio, los ingresos y recursos de cada cónyuge, la edad y la salud, la capacitación y la experiencia laboral, y la contribución de cada cónyuge al hogar y al matrimonio.
Para fijar la pensión compensatoria, los tribunales evaluarán todos estos factores y podrán tomar en cuenta otros factores relevantes en cada caso específico. La pensión compensatoria puede ser temporal o permanente, y su duración dependerá de la situación y las necesidades de cada cónyuge. Es importante que los cónyuges involucrados en un proceso de divorcio trabajen con abogados y expertos en finanzas para asegurarse de que la pensión compensatoria sea justa y adecuada para ambas partes.